Con una masa crujiente por fuera, suave por dentro e ingredientes de calidad, la propuesta de la pizzería veronesa Araldo está en el top 50 del ranking de las mejores de 2023.  

La pizza es uno de los platos típicos de la gastronomía italiana, pero ha trascendido fronteras para ‘colarse’ en la carta de restaurantes de todo el mundo. Y aunque muchos lo desconozcan, este mangiare —como dirían los italianos— tiene muchas variedades diferentes. 

Una de ellas es la pizza veronesa, que, aunque a priori no sea la más conocida, lleva ya varios años siendo una de las referencias mundiales en Madrid. La ‘culpa’ la tiene Araldo, la pizzería que aterrizó en la capital de España hace ya seis años para acercar un amor por la pizza que comenzó en Verona en 2004 por Sonia y Vittorio. 

La clave de sus elaboraciones está en la harina biológica semi-integral molida a piedra, obtenida de un trigo no modificado genéticamente (OGM), con una masa madre reposada durante 60 horas —a una temperatura y humedad controlada— y con aceite de oliva virgen extra. 

El resultado es una pizza muy crujiente por fuera y suave por dentro. Su masa es fina y ligera, pero soporta perfectamente el peso de sus ingredientes; por supuesto, italianos y calidad. 

Con esta carta de presentación, no nos sorprende que Araldo—que cuenta con dos restaurantes en Madrid; uno en el Barrio de las Letras y otro en Chamberí— se encuentre en el top 50 de las mejores pizzerías de 2023. 

Una carta de pizzas con ingredientes italianos de primera calidad

El compromiso por la calidad, la autenticidad de sus elaboraciones y de las materias primas son los sellos de identidad de Araldo. Y eso se traduce a las mil maravillas en una carta de pizzas veronesas ‘Da Verona con amore’. 

Los ‘antipastis’ son imprescindibles en la carta de un buen restaurante italiano. En la de Araldo encontramos ensaladas, embutidos, quesos italianos y también uno de los platos favoritos de sus clientes, La Panuccia di Araldo. El pan acompañado de queso burrata con tomates rojos semisecos y orégano es una excelente opción para abrir el apetito. 

Queso burrata con tomates semisecos y orégano

El groso del menú son sus pizzas, que se dividen entre las que tienen tomate y las que no. La primera opción son pizzas con salsa de tomate San Marzano confitada, hecha en casa con ingredientes italianos de calidad. Hay 10 opciones para elegir —y alguna más fuera de carta—, aunque hay algunas que sí o sí tienes que probar si visitas Araldo. 

La San Giacomo es una de las elaboraciones estrella, con salsa de tomate, queso grana padano curado 24 meses, tomates semisecos rojos y amarillos, queso Burrata y orégano. Su propuesta va desde la clásica Prosciutto hasta la Amatriciana o la San Marzano, una versión mejorada de la mítica margherita. 

Araldo

Pizza Salsiccia y Cipolla

En el otro lado de la carta, la opción de pizzas veronesas sin tomate, encontramos sus Pizza’s Biancas, sin salsa de tomate base. Una de las imprescindibles de la carta, como no, es la Veronesa con queso mozzarella fiordilatte, queso gorgonzola, speck, nueces y miel. 

Y tampoco puedes marcharte sin disfrutar de un buen postre. El helado es el dolce italiano por excelencia, así que en los dos restaurantes que Araldo tiene en Madrid podrás degustar sus helados artesanales de diferentes sabores, además de otros platos que endulzarán la velada. 

Araldo

Restaurante Araldo

La atención del personal y el cuidado al detalle, el buen gusto con el que está decorado el local y el ambiente completan la experiencia de la pizzería veronesa que arrasa en Madrid.

Imagen destacada: Araldo