El artista Íñigo Merino arrancó su gira ‘Tal Vez Mañana Tour’ con dos conciertos consecutivos en Castellón y Valencia, donde el público se entregó por completo a la experiencia.
Íñigo Merino estrenó su segundo álbum de estudio, ‘Tal Vez Mañana’, hace apenas un mes, y ya está cosechando los frutos de su trabajo. Tras presentar el disco en Madrid, ha iniciado su gira en la Comunidad Valenciana. El pasado 29 de abril, el pacense aterrizó en Valencia junto a sus músicos para ofrecer el segundo concierto de un tour que recorrerá más de diez ciudades.
Entre campos y playa, los seguidores de Íñigo se reunieron en La Casa de la Mar para disfrutar de un concierto lleno de buen rollo. Unos minutos más tarde de la hora prevista, el cantautor subió al escenario con decisión, acompañado de su inseparable guitarra y su banda. El público se sumergió en el ambiente desde el primer momento, haciendo los coros al protagonista, que escogió ‘Giro’ para abrir el show.
De ‘Lo de dentro’ a ‘Tal vez mañana’
Después de interpretar dos canciones consecutivas de su primer álbum, ‘Lo de Dentro’, la música paró durante unos segundos para dar paso a la conversación entre el artista y su público. En un ambiente íntimo y familiar como el de La Casa de la Mar, resulta un placer estar debajo del escenario y poder comunicarte así de cerca con quien está encima de él. «Bueno, venimos otra vez a Valencia con mi segundo disco, es un periodo súper ilusionante, la verdad, han cambiado muchas cosas desde que saqué el primero y estoy superencantado de estar aquí de nuevo», expresó emocionado.
Así, se fueron sucediendo canciones de este nuevo proyecto que presenta y del primero, que aseguró no querer dejar atrás en los directos. Y pronto llegó un momento especial, en el que los músicos abandonaron la tarima para dejar a Íñigo solo con su guitarra. En un formato acústico, ‘Tu cara de mi cara’ y ‘Por las ventanas’ sonaron con voz nítida entre las paredes de la sala.
Diez Vueltas al Sol
Lo cierto es que la intimidad no desapareció con el regreso de los músicos, pues era momento de interpretar esas canciones más melancólicas. «A veces me pongo triste y escribo canciones tristes, solo de vez en cuando», bromeó el extremeño. «Este tema lo escribí con mi cantautor favorito sin ninguna duda, un loco gallego que se llama Luis Fercán», adelantó. Como no podía ser de otra manera, la canción que llegó a continuación fue ‘Ámbar y el mar’, la única colaboración presente en su primer trabajo discográfico.
Este ambiente sosegado finalizó con el tema que cierra el álbum que acaba de presentar, ‘Diez Vueltas al Sol’. En la letra, habla de esa esperanza de que todo mejore, de volver a ser «esa persona de la que se sentía orgulloso». Movidos por la energía de esta esperanza que inundó el ambiente junto a la canción, los asistentes corearon una y otra vez ese «dime que no se ve todo de distinto color si me miras y me dices que hemos vuelto a ser los dos después de diez vueltas al sol».
«¡Qué puto gusto, joder!», exclamó ante el entusiasmo de sus seguidores. Y entonces nos contó una de las claves de ‘Tal Vez Mañana’, donde ha plasmado sus sentimientos sin ningún pudor. «El siguiente tema habla de estar todo el día de desparrame, sin hacer caso a la gente, se llama ‘Volando Alto’», introdujo.
Los pilares de Íñigo en el escenario
Evidentemente, los sentimientos están muy presentes en todas esas letras escritas por los cantautores que nos cuentan quienes son a través de ellas. Por eso, en el caso de Íñigo, que se desnuda emocionalmente en cada composición, resulta muy sencillo verse reflejado en sus vivencias. Una de esas canciones con las que todos y cada uno de los presentes se sintieron irremediablemente identificados fue ‘Si no estáis’. Con estos versos dedicados a sus amigos, les expresa todo aquello que no sabe decir con palabras, pero que le sale del corazón acompañado de una melodía.
En medio de este momento de unión entre esos amigos que habían ido juntos al concierto y cantaban juntos a pleno pulmón, el artista aprovechó para presentar a quienes lo acompañan encima del escenario, pero también lo sostienen debajo de él. El primer agradecimiento fue para su mánager, We Puebla, que se movía saludando a unos y otros con una cercanía envidiable.
Y, por supuesto, también dedicó unas palabras a sus músicos. «Al bajo, el hombre de las buenas palabras, de los buenos gestos, de las mejores recomendaciones musicales de la historia, Diego Leyva», recitó. «A la batería, él me cuidó mucho cuando llegué a Madrid y ahora es un placer compartir esto con él. Es un tipo excepcional y un batería de la hostia, Nacho Garmendia», prosiguió.
«Por último, a la guitarra… llevamos la misma sangre, hemos crecido juntos, los dos nos ilusionamos por la música a la vez… lo que más ilusión me hace de poder hacer esto es vivirlo con él, Nacho Climent», concluyó. Con estas sinceras declaraciones, nos hizo testigos del cariño que se profesan entre ellos, y que hace posible esa evidente complicidad entre ellos desde la primera canción.
‘Tal Vez Mañana Tour’: un espacio para la sinceridad y la verdad
La banda todavía no se había bajado todavía del escenario cuando ya le estaban pidiendo «otra», a lo que Íñigo contesto entre risas. «La verdad es que el momento bises, cuando la banda sale del escenario como tres minutos y todo el mundo pide otra canción es un absoluto compromiso, así que si queréis hoy nos lo ahorramos y nos quedamos aquí», se sinceró.
El primer bis fue ‘Dudo y tiemblo’, el single central de ‘Tal Vez Mañana’, que habla de ese momento visceral de rebeldía que implica perseguir tus sueños sin mirar atrás. Sin duda, fue uno de los momentos en los que la energía se disparó, con todo el público de pie y dispuesto a dar «ese golpe en la mesa» del que habla Íñigo.
A continuación, tocó ‘No tengo un plan’ y ‘Seda’, antes de dar paso a uno de sus temas más especiales, ‘El espejo’, dedicado a «las personas que más quiere en el mundo», su familia. La elegida para cerrar este inicio de gira fue ‘I love you’, que llenó de buen rollo el local. Pero antes de despedirse, el cantautor quiso mostrar su agradecimiento y reivindicar la dificultad de llenar una sala fuera de Madrid. «De verdad, ha sido un placer, muchísimas gracias por venir. Ojalá volver muy pronto a Valencia», deseó.
Ahora, este ‘Tal Vez Mañana Tour’ seguirá recorriendo ciudades y festivales en los que Íñigo seguirá dejando un pedacito de sí mismo. Con su sencillez y su constancia, llegará muy lejos con este proyecto tan personal que comenzó en 2020. Desde luego, hacen falta músicos como él, con la valentía de lanzarse al vacío sin un paracaídas, pero con la certeza de que están haciendo lo correcto.
Imagen destacada: Inma Vacas – Why Not Magazine