Lucy Morry no es solo una artista, sino un concepto que va más allá de lo musical. ¿Te atreves a descubrirlo con nosotras?
Lucy Morry es un tándem perfecto formado por Noah y Lucía, dos jóvenes que iban a clase juntos en el instituto y comenzaron a hacer música por casualidad. Aunque Lucy es quien pone la voz a las canciones, Noah está totalmente involucrado en el proyecto, pues su forma de producir va más allá de lo convencional. Por eso, se consideran un «dúo de composición», ya que trabajan en equipo durante todo el proceso de creación de cada canción.
Para ellos, este proceso es totalmente orgánico, pues lo abordan como una conversación entre dos amigos que se cuentan sus vivencias y se sienten identificados el uno con el otro. Su estilo es imposible de definir, algo impensable —pero mágico a su vez— en la industria de hoy en día. Lucy Morry es crudeza, honestidad y, sobre todo, experimentación.
Ambos tienen un estilo muy personal, pero los fusionan sin temor a romper unas «reglas» inexistentes en su concepción de la música. Lucía suele hablar de sus propias experiencias, sin ninguna distinción entre su parte personal y su faceta artística, que también es la más sincera. Noah, en cambio, utiliza la música como un instrumento para dar rienda suelta a su imaginación que le permite distanciarse de su vida cotidiana.
La creación del dúo
La unión musical de Noah y Lucía fue inesperada. Unos meses antes de la pandemia, coincidieron en casa de un amigo en común y compusieron, sin ser conscientes de ello, su primer tema juntos. Noah comenzó a crear una base aleatoria, y Lucía se sumó componiendo la letra. Ese mismo fin de semana, comenzaron un disco llamado ‘Camper’, que se puede escuchar en SoundCloud. Se trata de un EP muy «casero» que ellos consideran una maqueta, pero en cuyo sonido ya se percibe una personalidad abrumadora.
Durante un año, tuvieron que dejar reposar el proyecto por la distancia, ya que Lucy se mudó a Madrid y Noah se quedó en Mallorca. Cuando se reencontraron, se dieron cuenta de que la complicidad entre ellos seguía intacta y retomaron las sesiones de composición. En ese punto, ya sabían que harían un álbum, puesto que querían contar una historia extensa y cohesionada.
Además, All Nighters, su discográfica, se cruzó en su camino unas semanas antes de que lanzaran su primer disco oficialmente. Allí se sienten muy privilegiados, con la certeza de que pueden sentirse totalmente libres y recibir el apoyo de sus compañeros. Para Lucía, la oportunidad llegó en un momento crucial, cuando, justo al acabar la carrera, se dio cuenta de que podía dedicarse genuinamente a la música.
Owen (fucking) Gray, el pseudo-primer álbum de Lucy Morry
Lucía y Noah siempre componen varias canciones a la vez, y es que un tema siempre inspira el surgimiento de otro. De hecho, todavía no han asimilado que su pseudo-primer álbum ya haya visto la luz. Lo han bautizado como un pseudo-primer álbum porque ya llevaban muchos años creando discos, pero este ha sido el primero que han publicado de forma oficial.
View this post on Instagram
Al ser la primera historia que iban a construir, tardaron un tiempo en escoger los diez temas que forman parte de ‘Owen (fucking) Gray’, hasta conseguir una estética concreta y un hilo argumental compartido. El título hace referencia al actor de cine para adultos Owen Gray y, al mismo tiempo, es un homenaje a ‘Norman Fucking Rockwell!’ de Lana Del Rey. Otros de sus grandes referentes han sido Cindy Lee o Connan Mockasin.
La primera canción que compusieron para este álbum, ‘Dime Por Qué’, habla de las patrañas de Madrid, una ciudad que les estaba asustando bastante. Esta está ligada a todas las demás canciones a través de «rutas» que el oyente tiene que ir construyendo por sí mismo, pero la realidad es que cada una tuvo su momento y su propia historia. En las letras predominan el amor, la disociación y las mujeres, y destaca el recurso de la deshumanización, convirtiendo en muñecas o ángeles a sus protagonistas.
El sonido toma como base el pop. No obstante, Lucy y Noah han impreso su sello identitario, explorando un mundo sonoro con barreras difusas, muy envolvente y con cierta aura melancólica. Para entender el concepto, es necesario escuchar el álbum completo varias veces, recreándose en las baterías de los 50s, la distorsión de las guitarras y la voz casi angelical de Lucía.
La estética del álbum
Cada single de ‘Owen (fucking) Gray’ tiene su propia portada. La de ‘Solo Caí’ está dibujada por Noah, y es una representación del dúo. La de ‘Nancy’, la dibujó Lucía con la mano izquierda y a ciegas. Al igual que la música, la parte visual del proyecto está muy cuidada, algo que también se aprecia en el videoclip de ‘Mema’.
Ellos mismos se han encargado de crear un mundo audiovisual específico para el disco, pues solo ellos podían plasmar con nitidez la esencia de su creación. La portada del álbum, que muestra la cabeza de Lucy agarrada por los brazos de Noah, también está editada por el productor.
El pasado 2 de noviembre, el mismo día del estreno de ‘Owen (fucking) Gray’, lo presentaron en vivo en la sala El Sol de Madrid, donde algunos afortunados pudieron sumergirse en la mente de Lucy Morry por un tiempo. Ahora, su objetivo principal es trabajar en un EP relacionado con este álbum y cerrar algunas colaboraciones de las que tienen muchas ganas.
Por supuesto, también pretenden seguir creciendo como artistas, juntos y por separado. En aproximadamente un mes, Noah lanzará dos proyectos de música electrónica bajo un nuevo alter ego que descubriremos muy pronto.
Imagen destacada: All Nighters.