Hoy nos detenemos en Alerta Emergente para conocer a Mateo Eraña, una voz del norte que empieza a abrirse camino en la música con mucha verdad y sensibilidad.
Hay artistas que no necesitan demasiado para emocionar. Porque a veces, la música más honesta viene bajito, pero diciéndolo todo. Y si hablamos de las nuevas voces del pop-rock en nuestro país, aparece ese susurro del norte que está escribiendo su propio himno. Él es Mateo Eraña, nacido del silencio de una habitación en Gijón, de una flauta travesera que nunca fue el plan… pero que terminó abriendo todas las puertas.
La historia de Mateo no empezó con una guitarra eléctrica ni con un micrófono en mano. Empezó en el Conservatorio, a los 8 años, con una flauta travesera. Aunque lo que él realmente quería era tocar la batería, fue ese instrumento clásico el que le metió de lleno en el mundo de la música. Y así, sin saberlo, se fue forjando la sensibilidad musical que hoy le define.
Con el tiempo, y de forma autodidacta, también empezó a aprender batería. Ese fue su primer contacto real con el rock. Aprendió por su cuenta, se metió en bandas, probó escenarios pequeños… y un día se dio cuenta de que no solo quería marcar el tempo. Quería contar su historia con voz propia. Así empezó a cantar. Así empezó Mateo Eraña.
Como tantos artistas del norte, llegó un momento en que se encontró con un techo. Gijón le quedaba grande, emocionalmente, pero pequeño profesionalmente. Madrid le abrió el mapa: músicos, salas, oportunidades. Pero Asturias, su raíz, sigue latiendo en cada canción. Porque aunque ahora está de inquilino en la capital, la tierra tira. Y mucho.
Gijón le vio nacer… y despegar
Enero de 2024 fue el punto de partida real. Mateo agotaba entradas en el Teatro Albéniz de Gijón con solo 17 años. No era solo su primer concierto “de verdad”. Era una especie de declaración emocional en casa. Allí grabó en directo su primer single: “Amor al aire”, una canción que ya hablaba de su forma de entender la música.
Dos meses después, volvía a emocionar a su tierra. Esta vez en un estadio. El Molinón, casa del Real Sporting de Gijón. En un homenaje familiar. Nieto de Juan Eraña, histórico del club, y sobrino de Iñaki Eraña, su vínculo con el fútbol era más que sentimental. Aquella tarde interpretó sus canciones —entre ellas ‘Labios impacientes— y, de repente, el fútbol y la música se abrazaron.
‘406’, su primer EP
En octubre de 2024, lanzó su primer EP, ‘406′, y con él, nos abrió un poco más las puertas de su mundo musical. En ‘Labios impacientes’ se siente esa melancolía de perder a alguien especial, como una noche en la que los recuerdos y los deseos se mezclan con el paso imparable del tiempo. Con ‘Señoritas’ juega con esa sensación de caos y atracción que provocan esas personas que llegan a tu vida para desordenarla, dejar una huella intensa y desaparecer justo cuando menos lo esperas.
El miedo a perder a alguien se cuela en ‘Tengo miedo a perderlo’, una canción que refleja esa angustia y soledad que todos hemos sentido alguna vez, esa necesidad de aferrarse a lo que aún queda. Pero también hay espacio para la esperanza: ‘Hay luz’ transmite esa fuerza interior que aparece cuando todo parece apagarse, esa chispa que impulsa a seguir adelante pese al cansancio.
En ‘Amor al aire’ se mezcla el desamor con el orgullo, esa elegancia rota de quien intenta mantener la dignidad mientras el corazón lucha por recomponerse tras una ruptura. Y el EP se cierra con ‘Si tú no estás aquí’, un tema que habla del vacío y la tristeza profunda cuando alguien amado se va, y cómo ese dolor puede apagar la alegría y llenar el silencio de un eco difícil de olvidar.
Y este proyecto también ha crecido en escenarios con su artista. Porque este 2025, Mateo no ha parado. Lo hemos visto brillar en festivales como Boombastic Asturias, Mar de Jávea, Galaxy Sound en Málaga o para cerrar el verano en el Cooltural Fest en Almería o el Ewan Fest en Salinas, de nuevo en casa.
‘Transparente’, el nuevo capítulo
Mientras gira, no deja de escribir. Porque ya está en camino su primer álbum completo, que llevará por nombre ‘Transparente’. El single que le da título vio la luz en abril y habla de ese vacío que queda cuando alguien que fue tu refugio, ya no encaja: “Fuiste mi lugar seguro, ahora eres transparente como un cristal”.
El disco también incluirá otras canciones que ya se han convertido en favoritas del público, como ‘Prometo no llamar’, una oda a los amores que se recuerdan con ternura y distancia, o ‘Hacernos viejos’, su primera colaboración, junto a Punho Dragón.
@mateo.erana Hacernos viejos with Puñoooo #parati #rock #musicaenespañol #poprock
¿Y ahora qué?
A día de hoy, Mateo sigue escribiendo canciones, tocando en salas y festivales, y dando forma a su sonido, lo que queda claro es que tiene mucho que contar y muchas ganas de hacerlo.
No tenía prisa, pero tenía algo que contar con su voz y su guitarra. Y ahora que lo está haciendo, no hay quien lo pare. Sus canciones están ahí para acompañarte. Tiene una manera de cantar que no necesita gritar para emocionar. Tiene ese algo entre lo clásico y lo nuevo, entre el pop y el rock, que conquista. Pero, sobre todo, tiene tiempo. Tiempo para crecer, para equivocarse, para explorar. Y también tiene presente. Porque ya es parte de una generación de artistas que entienden la música como un refugio.
Así que si no lo conocías, este es el momento. Y si ya lo escuchaste alguna vez, seguro que sabes de lo que hablo. Porque hay canciones que no se olvidan. Y voces que llegan para quedarse.

