Una novela navideña llena de fantasmas, risas bajo el muérdago y todo el amor que todos merecemos. En un castillo escocés, dos personajes entrañables se enfrentan a un espíritu que no sabe cómo dejar atrás su hogar.
Henry MacTavish, decidido a convencer al fantasma de su tío Archie de que no es hora de partir, se ve inesperadamente acompañado por Natalia Castro, una botánica encantadora que trabaja para la Oficina de Rescate de Patrimonio Escocés. Juntos, intentarán salvar el castillo mientras celebran el solsticio de invierno rodeados de magia, misterio y una buena dosis de humor.

Paul Auster recibe el encargo de escribir un cuento navideño para el New York Times, pero, abrumado por la tarea, decide evitar la sensiblería típica de estas fechas. En busca de inspiración, visita el estanco de su amigo Auggie Wren, un fotógrafo que retrata la misma esquina cada día.
Allí, Auggie le cuenta una historia sobre una cartera perdida, que terminará siendo la semilla del guion de la película Smoke.

Una escritora de novelas románticas que quiere dejar atrás su pasado. Un bombero incapaz de olvidarla. Y una historia que demuestra que, cuando hay fuego, siempre quedan cenizas.
Esta Navidad, lo único que desea nuestra protagonista es estar en Nueva York y besar a un chico guapo en Nochevieja, o al menos terminar su novela. Lo que no esperaba era heredar el bed and breakfast de su familia, el Polaris, tras un incendio.
Y mucho menos tener que compartirlo con Jack Halliday, su exnovio, ahora bombero y encargado de la reforma del lugar. Mientras Jack sueña con reabrir el Polaris antes de Nochebuena, ella solo quiere venderlo y olvidar todo lo que dejó atrás. ¿Podrá el espíritu navideño curar un corazón roto?

¿Alguna vez has sentido que tu vida se desmorona y no sabes qué rumbo tomar? ¿Estás en la treintena y todavía no sabes dónde quedaron esos sueños que pensabas cumplir? Si alguna de estas preguntas resuena en ti, esta novela es para ti.
Al igual que el personaje de Audrey Hepburn en ‘Desayuno con diamantes’, que tenía un «día rojo» y se refugió en Tiffany’s, yo no vivo en Manhattan, sino en un pequeño piso de alquiler en Madrid. Después de un año para olvidar, decidí irme al pueblo donde crecí para pasar las vacaciones de Navidad. Mi plan era sencillo: desconectar, relajarme y reflexionar. Pero, claro, nada sale como lo planeado. Y, como era de esperar, por mi maldita mala suerte, me topo una y otra vez con él, el último ser en el que quiero pensar.

Charles Dickens (1812-1870) está tan identificado con la Navidad que se ha llegado a afirmar que él inventó la Navidad tal y como la conocemos hoy, y que, en cierto modo, Dickens es la Navidad. Este volumen reúne algunas de sus mejores historias navideñas, perfectas para leer o escuchar junto al calor de la chimenea.

Adriana Peña, técnica de sonido en Navacerrada, está enamorada del cantante Deacon Black, su ídolo. Cuando le ofrecen trabajar en su gira asiática, no duda en aceptar, pero su relación sigue siendo profesional, hasta que una noche se encuentran en el spa del hotel y Adriana no puede ocultar sus sentimientos.
Tras una ruptura, Deacon acepta la invitación de Adriana para pasar las fiestas en su casa, a pesar de su aversión por la Navidad. Lo que no sabe es que el espíritu navideño tiene otros planes para él. Una historia de amor llena de magia navideña y sorpresas.

Fuente: Amazon España
‘El Cascanueces y el Rey’ es un cuento de E.T.A. Hoffmann (1816) en el que el juguete Cascanueces cobra vida en Nochebuena, derrotando al Rey Ratón y llevando a Marie a un reino mágico. En 1892, Tchaikovsky, junto a los coreógrafos Petipa e Ivanov, transformó la historia en el ballet ‘El Cascanueces’, convirtiéndolo en una de las composiciones más icónicas y populares de todos los tiempos.

Este año, Santa Claus viene acompañado por Cupido. Lola viaja a Minnesota como niñera para mejorar su inglés, pero los niños que debe cuidar son un verdadero desafío. Cuando los mellizos se escapan, la magia navideña hace realidad su deseo de un descanso. ¿Quién mejor para ayudarla que el elfo de Santa Claus?

Un mes para que mi corazón lata de nuevo. Regresar a los Alpes por Navidad con mi padre, tras mi trasplante de corazón, está siendo todo un desafío. Mi vida ha estado rodeada de reglas: alimentación estricta, ejercicio controlado, y horas de estudio.
Ahora, mi único objetivo es escapar del constante control de mi madre y pasar este tiempo con mi padre, un hombre impredecible. Tal vez, entre el frío y las montañas, logre dejar atrás mis temores y empezar a creer que los milagros pueden suceder.

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