El Zebra XLive fue un éxito en La Riviera, uno de los espacios más icónicos de Madrid, con la gran final del concurso de bandas emergentes, el concierto de Anabel Lee y varias sesiones de los Zebra DJs, poniendo a la música indie como epicentro de la noche.
Zebra XLive, el nuevo gran evento de Zebra Club, tuvo lugar el sábado 24 de mayo en la sala La Riviera. Los asistentes vivieron un inédito acontecimiento musical que define a toda una generación: el género indie con todas sus formas, colores y ritmos. Bajo luces vibrantes, grandes pantallas y con el río como testigo mudo, el club ofreció una experiencia sonora que todavía retumba en los oídos de todos los que asistieron.
Le siguió Meriendacena, que desplegó su universo propio, fresco y directo, dejando claro por qué son una de las propuestas más divertidas de la escena con, por ejemplo, ‘Me Da Igual’. Y por último, pero no menos importante, Marsella, que con sus sintetizadores y esa estética ochentera provocaron los primeros bailes desatados, incluyendo los de los propios artistas. Algunas de las canciones que tocaron fueron ‘Por Nosotros’, ‘Años 80’ o ‘Para Toda La Eternidad’, entre otras.
Concierto incendiario de Anabel Lee
También entre cada una de las actuaciones, los DJs del Zebra Club tomaron el relevo y la música no paró ni un solo segundo en Zebra XLive. Peredius, Djake, Bea Miau y Adrián Lefreak, al igual que cada fin de semana en el Club Zebra, acompañaron a los espectadores con cada uno de sus sets.
Sin embargo, el momento más intenso y esperado de la noche llegó con el concierto en directo de Anabel Lee. Su show fue toda una sacudida emocional con cada una de sus canciones, como ‘Me Cago En El Amor’, ‘Me Das Asco’, ‘Deberías Estar Conmigo’ o la mítica ‘Si Antes Te Hubiera Conocido’ de Karol G, que la reinterpretaron. Letras afiladas, actitud incendiaria y una entrega absoluta que transformó a toda La Riviera en una euforia compartida.
Y cuando parecía que no podía ir a más esta reunión musical, los DJs volvieron para cerrar la noche por todo lo alto y convertirla en algo inolvidable. Buena música, bailes desenfrenados y un ambiente de celebración total que se alargó hasta bien entrada la madrugada, cuando el cuerpo ya no aguantase más.
En resumen, esta oportunidad que muchos pudieron vivir lo recordarán como una gran noche donde la música indie fue mucho más que un género, el Zebra XLive fue hogar.
